VIAJE EN METRO
Adrián tenía de ir a Plaza Catalunya, eso fue lo que le dijo Lucas por Whatsapp, esa quedada era bastante urgente, tenían que hablar de sus cosas. Él bajó las escaleras del metro, ese día hacía un tiempo un poco triste pero había muchísima gente esperando el tren. Una señora con un perro que temblaba, un señor leyendo el periódico, una niña con un globo de color turquesa…
Todos ellos miraban las vías del tren, que llegó haciendo ruido, como siempre, pero esta vez era más raro. No le dio importancia.
Las puertas se abieron, Adrián entró al tren con todos, él se agarró de una barra y el tren empezó moverse, se sacudió como si estuviera muy cansado.
Cada persona miraba sus cosas, una joven su móvil, un abuelo miraba su reloj, un grupo de chicas hablaban mientras miraban el paisaje… Adrián miró el cartel del metro, aún quedaban tres paradas, de repente las luces parpadearon, el metro se paró, no se movía. No había ruido, solo un silencio incómodo.
Todos se quedaron quietos, alguien suspiró, una señora frunció el ceño, un niño abrazaba su abrigo. Adrián miró por las ventanas del tren, solo se veía negro. Al momento sonó el altavoz, alguien hablaba pero no era una voz normal, era como si hablara con la boca llena de comida, no se le entendía nada, el tren seguía sin moverse , entonces Adrián vio cómo un niño empezaba a llorar en silencio.
Adrián muy asustado apretó la barra, su corazón no paraba de latir fuertemente, pum, pum, pum… y de repente el tren tembló un poco e hizo el mismo ruido que hizo al llegar a la estación del metro. El tren volvió a moverse.
Todos respiraron de alivio, faltaban aún dos paradas. El tren pasó por un sitio donde habían muchas vistas increíbles, afuera había muchísimas luces de otras ciudades, luego de eso tocó pasar por un túnel.
Otra parada más, un grupo de mujeres bajó, una de ellas se dejó su cartera en el asiento, Adrián lo vio y corrió para dársela, la mujer guapa se lo agradeció, pero él no le pudo decir nada porque el tren se iba. Él llegó de milagro.
La gente del tren al ver su acto se sintió muy cómoda porque veían que Adrián era un buen chico. Faltaba una parada, Adrián se fue preparando.
El tren llegó a Plaza Catalunya , las puertas se abrieron y la gente empezó a salir, Adrián bajó también, él fue para casa de Lucas ya que no lo encontraba. Él tocó la puerta, toc, toc, toc… Nadie abría la puerta.
Lucas no estaba, él miró el móvil y había un mensaje de voz de Lucas, Lucas decía que llegaba tarde porque había ido a buscar a unas personas al metro. A Adrián le pareció raro que no le hubiera dicho que venía mas gente con ellos. Pero no le molestó porque cuantos más mejor.
Al pasados diez minutos, se vio desde lejos como Lucas llegaba , pero lo que más le impresionó a Adrián era que venía con un grupo de mujeres, pero no cualquier grupo de mujeres, eran las que estaban en el metro, justo ahí estaba esa chica que le dio la cartera…
Categoria de 13 a 17 anys. Institució Igualada