El guante rosa
Abro los ojos
Un guante en mi mano
Una señora desmayada en el suelo delante de mí
Mi cabeza en blanco
Dónde estoy
Cómo he llegado
Quién soy
Ansiedad modo ON
No reconozco mis manos, ni mi ropa…
-¿Cómo te llamas? ¿Es a mí? No sé, no contesto
Busco dentro de una cabeza que no es mía
Aprieto el guante ¿Y el otro? Debería guardarlos, los perderé
A mi derecha una mujer sentada, los asientos son grises, estamos en metro; que poca empatía, no parece tener derecho a éstos asientos reservados
¿Y yo?
Me mira ¿preocupación,pena? una mezcla supongo
Busco un bolso que no sé si llevo¿Dónde está el otro guante?
Ni bolso ni mochila,perderé el guante
Intento ponérmelo para no perderlo.Es rosa,no me gusta el rosa
La señora desmayada tiene los pies en alto,le hacen aire con un mapa. Está blanca, resopla y suda; pero consciente.
No me cabe el guante
Hay mucha gente en el andén ¿no entran? Hay espacio suficiente, toda la gente está de pie
El guante se ha atascado, es pequeño y estrecho.
Baile de colores en el andén amarillo naranja y muchas luces blancas.
Aprieto los ojos, de lejos veo borroso
¿Llevo gafas?
Froto mis ojos, el guante sigue atascado y la cercanía de la pequeña prenda rosa me permite olerla
Ese aroma
Lo conozco, inspiro hasta que mis pulmones no se pueden expandir más y cierro los ojos analizando, buscando
Mi cabeza no relaciona el aroma, pero lo reconoce. Rabia
Mi vista se acostumbra y la escena exterior es más nítida,en el andén personas de naranja y amarillo van de arriba abajo, compenetrados, concentrados. Me molestan las luces blancas, cegadoras, hay muchas
¿Están grabando un Tiktok? No hay música, sólo mucho jaleo
La incívica señora de mi derecha acaricia mi espalda
¿La conozco?
Intento zafar mi mano del guante rosa, no puedo, la lana se ha enganchado con el osito de mi anillo
Granate, alguien vestido de granate corre y chilla.
Chilla “montruos” a los cámaras del Tiktok sin música, que borde
Bajo la vista para liberar el guante. Estiro, cruje y rompo la fina lana que los unía… Tengo un tatuaje en mi muñeca.
El de granate irrumpe en el tren va a la señora del suelo y se agacha a su lado, y nos mira, y la señora pesada de mi derecha asiente. Será un borde pero no nos mira mal, su mirada me duele y no sé porque
MARINA es lo que reza en el tatuaje
¿Es mi nombre?
Miro los dibujitos del tren, hay una estación que se llama Marina. Estamos en Marina.
¿Llevo tatuada la estación a la que voy?
Mi voz no funciona. En el tren está casi vacío, pero en el andén hay más gente de amarillo y naranja que hacen corrillo alrededor de algo que hay en el suelo.
El borde de granate está frente a mí y no me deja ver. Me estudia, me mira, que incómodo, este señor está invadiendo mi espacio. Deja a ambos lados las cosas que lleva en la mano, es un walkie que no para de hablar y unas llaves grandotas
MARINA sale de mi boca, arrastro la M , mis labios están aletargados. MARINA repito, me gusta la sensación, la misma que el aroma del guante.
¿Dónde está el guante?
Lo busco, lo veo
Empujo al de granate, mi equilibrio no es bueno y caigo, pero el guante está a mi alcance.
Y entonces la veo en el andén
3 MINUTOS ANTES
Marina y yo entramos al metro, el tren está abajo. Llego tarde, mi jefe me agobia por el whatsapp. Corro con ella tirando de su manita de 4 años con guantes
El tren pita, corro y entro y estiro de ella
Ella queda fuera, enganchada en la puerta su manita sin guante, y el tren arranca.
5 MINUTOS DESPUÉS
¡Está viva!
Y yo pierdo la consciencia