Semillas de calabaza
Era un lunes oscuro, parecía que iba a llover, pero antes de llegar a casa decidió parar en la panadería de toda la vida, recoger su barra integral con semillas de calabaza, Lo que no sabía es que aquella noche su pequeño manjar no llegaría a casa. Cuando iba a hacer transbordo en Diagonal, sin darse cuenta y con la multitud de gente que había aquella hora, se dejó la barra de pan en su asiento. Diego, el chico a su lado, intentó decírselo, pero las puertas se cerraron y no pudo llamarla.
qué bueno que está el pan integral.
-El otro día te olvidaste tu barra de pan integral en el metro y yo te la cogí.
La puerta metálica del ascensor brillaba con todas sus fuerzas y el número rojo indicaba que el ascensor ya estaba llegando a la planta baja. Corrió. Cuando llegó a la entrada del bloque vio cómo Laura se besaba con otro chico, el vecino del cuarto. Allí se acabó una bonita historia que hubiera podido ser de amor.
Categoria de 13 a 17 anys. Institució Igualada