No todo es lo que parece
En 2010 nació una niña rubia de ojos verdes, la cual era muy bella, toda su familia cuando la vio por primera vez pensó que era un ángel que cayó del cielo. A medida que fue creciendo era cada vez más cercana a sus padres, pero sobre todo al padre, siempre salía con él, iban al bar juntos, él le compraba muchas cosas… incluso una vez llevó a su hija a Montjuïc para subirse al teleférico y poder ver como es la ciudad vista desde arriba, en cambio su madre siempre que su hija hacía algo mal la reñía, la castigaba sin ir al parque, etc.
La niña fue creciendo y en 2018 sus padres se separaron, eso a ella la afectó mucho, ya que la custodia se la quedó su madre y ni siquiera podía vivir con ella, tenía que vivir con sus abuelos y solo podía ver a su padre un fin de semana sí y otro no. Al principio la niña lo llevaba como podía, ya que solo tenía 8 años y no entendía muy bien lo que pasaba. Fue pasando más y más tiempo y la niña, que ya no era tan niña, se fue dando cuenta de cómo era su padre realmente, ya que su padre casi siempre estaba borracho, no era responsable, etc.
La cría intentó muchas veces hablar con su padre e intentar hacerle entender que ese no era un buen camino para él y que al final iba a acabar mal, pero él nunca le hacía caso, siempre iba a peor hasta que se fue alejando de su padre y acercándose a su madre hasta el punto en que dejó de hablar y ver a su padre.
Ahora ella vive con su madre y no sabe nada de su padre desde hace 3 años, porque ella decidió que lo mejor era no saber nada más de su padre, ya que la niña lo pasó muy mal por él y él no hizo nada para cambiarlo.
Fin.